viernes, 20 de junio de 2008

Impulsos Nerviosos

Dolor de panza, ansiedad y sin ganas de comer. Te bañas y te lavas los dientes un poco más minuciosamente que lo normal. Te descubrís granos y puntos negros que nunca habías visto antes. Elegís medias y ropa interior como si fueras a modelarla. Cuando en un día normal te pones cualquier ropa interior con dibujitos y medias con agujeros. Te cambias de ropa como 7 veces. Y por primera vez te preocupa que algo combine.

Miras el reloj como veces al espejo. No queres llegar tarde, pero el tiempo nunca nos da una mano cuando lo necesitamos.
Calculas todo para llegar a tiempo, pero siempre llegas tarde o la otra persona te hace esperar. Todo medio de transporte, TODO, tarda mucho mas que otras veces. El transito es peor que otras noches. Y sentís que no llegas más.

¿Cuánto esperar en una esquina? ¿15, 30, 40 minutos? ¿Una hora?
Y recién pasaron 2 minutos, pero ya estas pensando hasta cuanto vas a esperar.

Miras a cada una de todas las personas que pasan por delante, detrás y costados tuyos.
Y por más que te haces él que estas esperando “tranquilo”, seguís buscando y mirando. Y chequeas la hora cada 4 minutos, ni más ni menos.
Mientras vas pensando ¿De qué le hablo para romper el hielo? ¿Qué le digo? ¿Le digo que espere 30 minutos o que recién llegue?

Llega y esta a punto de cruzar la calle hacia vos. ¿La miro mientras cruza? (con sonrisa entupida y con gestos de querer decir algo pero no hay nada que decir) ¿O me hago el distraído? (Y actúo como que me sorprende con su llegada)

Nervios.

¿Pero qué sería una cita sin los nervios previos?

¿Cuánto te puede llegar a gustar una persona que no te causa nervios verla?


Es la señal de que vale la pena.

Porque no hay otra manera de ganar y de ser feliz, que no sea arriesgándose a sufrir.

Puede terminar bien o mal. Pero así y todo, haber valido la pena.
Y no solo hay que arriesgarse a ser feliz. Tiene mas merito quizás el arriesgarse a poder llegar a sufrir por alguien.

En definitiva la vida es vivir arriesgándose a ser feliz.


O así tendría que ser...sin rendirnos y sin que nos convenzan de lo contrario.

5 comentarios:

  1. Es verdad, la vida es vivir arriesgándose a sufrir quizás para después ser feliz.

    Cuando me sucedía un desamor, preguntaba ¿por qué? ¿por qué me tiene que pasar esto si yo no me lo merezco, no me mandé ninguna cagada?
    Y sufrí la duda de la pregunta mucho.

    Pero ahora puedo contestarla, la pregunta es simple: ¿por qué?; la respuesta también: porque me esperaba alguien mejor, alguien que ambos mereciéramos más.

    Entonces comprendí que el sufrimiento también hace a la felicidad :-)

    ResponderEliminar
  2. Hoy estoy completamente de acuerdo. Me acuerdo una vez que escribí un poema con un par de versos que decían que el precio que había pagado para dejar de pasarla mal era primero haber dejado de reir.

    ResponderEliminar
  3. Luissssssss!!
    hace mucho q no habamos...
    :(


    gue... todo eso q escribiste es verdad! sobretodo lo de los 4 minutos entre vistazo y vistazo al reloj...
    a mi hasta me pasa q cuando voy a mirar el reloj ya se q hora va a mostrar...
    me paso el sabado... yo me decia "son las 8.54" y eran las 8.54...
    me asuste a mi misma :S
    x)


    q andes bien Sr.! :)
    miss u...

    Peace!

    ResponderEliminar
  4. una buena manera de medir nuestro interes por la otra persona es por pulsaciones y dolores de panza....

    es una relacion directa a medida que uno aumenta el otro se dispara...


    besosss
    oliveria

    (www.fotolog.com/oliveriart)

    ResponderEliminar
  5. qué loquitos que somos...de ponernos tan nerviosos por ansiar...algo que YA tenemos!

    no será el miedo de compartir el amor que llevamos dentro, lo que verdaderamente nos asusta...?

    ResponderEliminar

Related Posts with Thumbnails