Cuando alguien hace o dice algo que te gustó, te sorprende,
y eso genera una sensación de volver a conocerla. Es como si la saludaras de
nuevo, y por lo tanto, aparece un nuevo "hola". Y cuando dice o hace
algo que no te gusta, aparece un nuevo "chau". Y así, la gente se va
acercando o alejando de tu nuestra vida.